Estrategias para motivar la curiosidad de los estudiantes

La macroinvestigación prepara el escenario para la curiosidad, pero no sostiene la curiosidad con el tiempo. En cambio, la microinvestigación son pequeñas prácticas y factibles en las que los estudiantes participan varias veces al día para fomentar su curiosidad. Aquí algunas estrategias:

  • Previo al inicio de una actividad, preguntar al estudiante cuál cree que será la solución. Tanto a la mitad de la actividad como al final, el alumno deberá comparar su pensamiento inicial con su comprensión actual.
  • Plantear preguntas al inicio de una actividad y pedir al alumno proponga de qué manera harían el cuestionamiento más interesante.
  • Los estudiantes escriben su reflexión escrita en torno a un problema. Posteriomente lo comparten con un compañero y al final lo discuten en clase.
  • Profundizar en las preguntas ayudándose de las preguntas: qué, cómo, hasta qué punto, dónde y cuándo.
  • Uso de las preguntas «¿qué te hace decir eso?» o «¿dónde averiguaría si tienes razón?». Esto los llevará a buscar su propia lógica y precisión en el pensamiento.

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