¿Cómo hacer de la escuela católica una escuela de cuidados?

Esta interrogante fue respondida por Javier Cortés, ex presidente de SM, en el marco del I Foro Internacional Escuela Católica ‘Una escuela que cuida’. Para Cortés  se necesita, en primer lugar reconocer la situación actual en la que se encuentra la humanidad. “Algunos autores hablan de que estamos en el antropoceno, es decir, que en este momento es la actividad humana, por primera vez, la que está provocando cambios en la naturaleza”. Lo siguiente será recordar que “nuestro motor, como creyentes en el evangelio, es la esperanza… Nunca el miedo ha sido fundamento de ningún gran proyecto”. Lo tercero es acudir a la Palabra de Dios porque “Él es el paradigma del cuidado, que nace de su propio ser cuidador con nosotros. Por ello, la escuela católica debería recuperar un ‘ser’, no una lista de valores que transmitir a los alumnos”. Finalmente, llamó a recordar que “la educación, que es sacar lo mejor de cada uno, no se logra sin el elemento relacional“, es decir el vínculo alumno-profesor, alumno-alumno, escuela-familia, educador-tradición educativa, escuela-sociedad y escuela-naturaleza.

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