Niños aislados y niños rechazados no son lo mismo

A menudo, como educadores, encontramos entre nuestros alumnos, a niños con problemas de marginación social. Algunos son rechazados por sus compañeros; otros, se aíslan por voluntad propia. ¿Qué diferencias hay entre unos y otros, y cómo ayudarlos? De acuerdo con una investigación publicada en el Journal of Youth and Adolescence, existen muchas diferencias entre niños aislados y los niños rechazados; entre las más grandes está que estos últimos tienen mayores probabilidades de tener comportamientos destructivos, y también son menos propensos a ser amables o tener un buen desempeño escolar. Y en el caso de los alumnos aislados, es común que se presentan comportamientos de inseguridad, timidez, tristeza, entre otros. Aunque todavía falta más investigación sobre las diferencias entre ambos grupos, para poder darles una mejor atención y evitar problemas de salud mental en un futuro, el estudio da algunas claves para ubicar a unos y a otros, y poderles ofrecer un mejor acompañamiento.

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