Las metodologías activas

En un artículo sobre las metodologías activas en el área de Religión, el profesor José Antonio Fernández Martín explica que los nuevos planteamientos de organización de los espacios educativos exigen establecer ambientes de aprendizaje o ambientes educativos de calidad, con base en las necesidades e intereses del individuo. Para ello, señaló, es importante tomar en cuenta el espacio y el ambiente, que conducen a que todo lo que hace o aprende el individuo, tenga lugar en un espacio que por sus características positivas o negativas, interviene en su aprendizaje con disímiles niveles de posibilidades y restricciones para su desarrollo. En ese sentido, destacó que los rincones o ambientes de trabajo son espacios delimitados y concretos, ubicados en el centro escolar (aulas, pasillos, corredores, etc.), donde los alumnos trabajan de forma simultánea y en pequeños grupos o individualmente tareas manipulativas, investigan, desarrollan su creatividad y autonomía y realizan proyectos guiándose por sus gustos, intereses y su curiosidad. Principalmente -dijo- se movilizan cuatro procedimientos básicos: la observación, la experimentación, la asociación y la expresión.

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